domingo, 11 de noviembre de 2012


QUIERO DESPERTAR  DE ESTA PESADILLA.
SEGUNDA PARTE
Enero 1992
Solo han pasado unos cuantos días desde que regresamos de las vacaciones y mis temores ya se han confirmado el teniente Nuño  es intolerable, sus políticas de mando son inflexibles  y sus órdenes deben ser cumplidas en el acto y al pie de la letra so pena de sufrir las consecuencias, empiezo a arrepentirme de estar aquí, en el poco tiempo que tenemos libre él se convierte en el tema de toda conversación a nadie le gusta la severidad con que nos trata.

Es la mañana del lunes 13 de enero, el suboficial que se encuentra de servicio parece agitado y nos ordena formar rápidamente, mientras formamos  los demás oficiales y suboficiales de la compañía comienzan a llegar  con igual agitación y totalmente equipados,  pareciera que se trata de una situación de emergencia, como siempre una oleada de murmullos se apoderan de la formación  todos queremos saber que pasa pero toda conversación termina en la misma pregunta y sin una respuesta.

Pronto un oficial recién graduado y de grado subteniente llega para recibir el parte de la compañía, "el parte es la acción en la que el oficial o suboficial de menor rango forma a cualquier grupo de militares, revisa que todo esté bien y reporta  cualquier novedad al  oficial o suboficial de mayor rango o mayor antigüedad " el oficial recibe el parte y se dirige a nosotros para informarnos que a partir del momento estamos  en acuartelamiento de primer grado, es decir que debemos estar preparados para ser enviados a la zona de combate en cualquier momento y que pasaremos los próximos 15 meses en medio de la selva combatiendo con la guerrilla. Esta vez no hay murmullos en la formación por el contrario todos nos hemos quedado en un silencio casi sepulcral.




una extraña sensación se apodera de mi mente y entonces pienso, que durante estos tres meses me han entrenado y preparado para la guerra, he sido humillado y he comido mierda para poder llegar hasta aquí, para convertirme en soldado e ir al combate pero ahora me doy cuenta que en realidad nunca pensé en las consecuencias de haber  venido al servicio militar y acabo  de estrellarme de frente con una realidad que honestamente me aterra, una realidad que pronto me llevara a un terreno desconocido pero ya no será para un entrenamiento sino para vivir una  guerra, una guerra en la que las balas son de verdad, balas que hieren y también matan, estaré allí  para perseguir y matar a personas que ni siquiera conozco y que estoy seguro que tampoco me conocen a mí, personas que quizás igual que yo tienen familia y sueños que aunque parezcan imposibles son sus sueños al igual que mis sueños son míos.


Una gran agitación entre los soldados interrumpe mis pensamientos y la causa de dicha agitación  es mi teniente Nuño que se aproxima y muy furioso grita " que están esperando, que su madre venga  a ayudarles a empacar?  Voy a contar hasta diez y espero que cuando termine todos estén aquí equipados y armados………  reclutas mal olientes" termino diciendo el furioso oficial, luego empezó a contar  y todos corrimos en busca de nuestros equipos y las armas, pero mientras empacaba mi mente no dejaba de darle vueltas al asunto, como quisiera en este momento poder devolverme tres meses en el tiempo y cambiar de decisión porque hay una voz en mi interior que me dice que mis manos no son para matar sino una herramienta para luchar por mis sueños, una voz que me dice que yo no nací para ser héroe  y tampoco quiero serlo, solo quiero  regresar a casa y seguir persiguiendo esos sueños, porque aquí con lo único que podre soñar cada noche es con estar vivo al amanecer y sobrevivir durante el día en una guerra que yo no comencé y que no  puedo terminar  porque esta  guerra que no es mía.

Continuara